Se va a ofrecer información sobre las sillas salvaescaleras debido a que son un sistema elevador que, por medio de una guía que se encuentra instalada en una escalera, va a permitir que cualquier persona pueda ir de un piso a otro.
Se suele emplear en aquellas viviendas en las que hay alguna persona con cierta edad ya avanzada o bien cuando hay una persona que está mala y que es incapaz de desplazarse por sí misma.
La forma de funcionamiento es muy sencilla ya que el usuario se tiene que dentar en una silla que se encuentra mecanizada con el fin de poder subir escaleras.
Ventajas de las sillas salvaescaleras
Total Access va a contar en este artículo todas las ventajas con las que cuentan este tipo de sillas y es que son un elemento ideal en el caso de que haya personas en el hogar que sean discapacitadas o que estén enfermas.
Es cierto que las sillas salvaescaleras son un producto cada vez más popular porque puede mejorar la calidad de vida de cualquier persona que cuente ya con cierta edad.
Existen distintos tipos de sillas salvaescaleras y cualquier persona puede dar con una que cuente con buenas prestaciones y con todo lo que necesite para su día a día.
Otra ventaja con la que cuentan este tipo de sillas es que se encuentran diseñadas para poder subir y bajar escaleras sin que el usuario tenga que hacer grandes esfuerzos.
Por este mismo motivo son cada vez más las personas que las adquieren porque, en el caso de que haya una persona mayor en la vivienda o que se encuentre discapacitada, no va a resultar necesario tener que contratar personal cualificado.
Se puede decir que una silla salvaescaleras es una especie de solución que resulta sencilla porque por medio de la misma la persona en cuestión va a poder desplazarse en el interior de la vivienda de forma cómoda.
Sillas salvaescaleras: una buena opción
Son una opción que resulta de las más solicitadas y es que muchas familias tienen claro que en su día a día necesitan una silla salvaescaleras para las personas mayores que viven con ellas.
Hay que mencionar que las sillas salvaescaleras se pueden encontrar en el mercado y es que cada vez más cuentan con los últimos avances en seguridad porque están diseñadas para que los usuarios que las vayan a usar se sientan bien.
Algunas incorporan una función para poder detectar cualquier tipo de obstáculo y durante la subida o la bajada de la escalera son capaces de detectar dicho obstáculo.
Y es que se detienen de forma totalmente automática con el fin de poder garantizar al usuario una buena seguridad en el momento en el que se siente en ella.
Es conveniente mencionar que la instalación de las sillas salvaescaleras no va a requerir de ningún tipo de obra y es que las molestias van a ser mínimas.
De hecho un técnico que se encuentre cualificado va a proceder a la instalación de esta silla en poco tiempo y no tendrá que realizar ninguna obra.
Aunque sí que es cierto que la escalera en cuestión va a necesitar un ancho de 65 y 75 cm y suele ser aconsejable que la zona del rellano cuente con una anchura mínima con el fin de que el usuario en cuestión se acomode de forma cómoda a la misma.
Lo mejor de esta silla es que da mucha autonomía al usuario
Las sillas salvescaleras son perfectas para todas aquellas personas que cuenten con movilidad reducida, que estén enfermas o bien que sean discapacitadas.
Piensa que para este tipo de personas el hecho de tener que depender de alguien cada dos por tres supone un agobio y es que estas sillas van a darle al usuario mucha autonomía.
No tiene ningún tipo de complicación y es que el usuario solamente se va a tener que sentar en la misma y tendrá que darle a una palanca de control con el fin de poder desplazarse hacia arriba o hacia abajo.
Hay que añadir que dicha palanca está siempre al final del brazo del asiento de forma que el usuario que la va a utilizar puede hacer uso de la misma tanto con la mano como con el brazo.
Lo mejor de este tipo de sillas es que cualquier persona que tenga problemas de movilidad puede hacer uso de la misma sin necesidad de que alguien le ayude.
Se trata de una buena forma para que el usuario gane cierta autonomía y que de esta manera no acabe con ansiedad o con depresión por pensar que tiene que depender de alguien.