En estas fiestas regala perfume, no te olvidarán

Podrías ver la rosa, pero el perfume, jamás. Y esa es la verdad de las cosas, su perfume.

Arthur Miller

Si quieres hacer un regalo inolvidable a alguna persona especial en estas fiestas y no te decides, te propongo una idea, regala perfume, y de esta forma la persona te recordará cada vez que la use, siempre estarás en su mente cuando perciba su aroma. Según los datos, los seres humanos podemos recordar hasta el 35% de los olores que percibimos, ya que el olfato es el sentido más potente que poseemos, así que podrá recordar ese olor e inmediatamente relacionarlo contigo, aunque no lo esté usando en ese momento. El olor está intrínsecamente asociado con las emociones humanas y por eso, los olores nos devuelven al presente momentos del pasado o recordarnos a personas a las que asociamos con ese olor, y volver a sentir esa misma sensación inolvidable gracias al poder del olfato, hasta ahí llega la memoria olfativa…

¿Qué perfume regalar?

La elección del perfume ideal dependerá de la personalidad de la persona a la que pretendemos regalar ese perfume, ya que cada aroma encierra una particularidad esencial,  que hace que un perfume se adapte más a las características de cada individuo.   Por ejemplo, los aromas florales son ideales para aquellas personas que necesitan equilibrar sus emociones, los aromas afrutados ahuyentan las energías negativas, las esencias dulces atraen el amor y las de hierbas silvestres relajan.

A mí personalmente me encantan los perfumes Esenssi, que puedo encontrar en mi perfumería habitual. Essensi es una empresa líder en distribución y venta de perfumes de equivalencia de alta calidad a granel, con más de 200 referencias en catálogo. Como fabricantes especializados en perfumes a granel, cuentan con laboratorios propios en los que perfumistas de reconocido prestigio diseñan perfumes con alta concentración de esencia, gracias al empleo de materias primas de máxima calidad. En su amplio catálogo de perfumes se pueden encontrar perfumes masculinos, perfumes femeninos, fragancias infantiles, fragancias frescas, ambientadores… de la mejor calidad y a un precio inmejorable.

La perfumería de equivalencia está de moda hoy en día, pero lo cierto es que ya existía en nuestro país desde hace muchos años, aunque para la gran mayoría esta realidad era totalmente desconocida.

¿Por qué comprar perfumes de equivalencia?

Los precios desorbitados que acostumbramos a ver en las principales marcas de perfumería, ha provocado una fuerte demanda de perfumes de equivalencia, ya que estos últimos, además de ser más baratos, su fragancia es rica y duradera, y no tienen nada que envidiar a la perfumería de primeras marcas.

Comprar perfumes de equivalencia es una inteligente idea y te voy a decir por qué:

En primer lugar, está el precio. Los productos de las primeras marcas se venden a unos precios exageradamente altos, por lo que en muchas ocasiones se convierten en un artículo de lujo solo apto para unos pocos privilegiados. Los perfumes de equivalencia, por el contrario, son accesibles a un público mucho más amplio, ya que se venden a precios muy asequibles.

La creencia de que cantidad es igual a calidad, que a mayor precio, mejor el producto, está muy extendida, pero esto es un error. Las grandes multinacionales invierten millones en grandes campañas publicitarias, marketing, imagen… lo que contribuye a encarecer el producto, y además la marca también se paga.

La fragancia de los perfumes de equivalencia es tan agradable como la de los productos de marca, y además, a diferencia de lo que algunos afirman, su olor puede prolongarse durante varias horas como si nos lo acabásemos de poner.

Regalar perfumes de equivalencia parece que está triunfando esta Navidad, y no es de extrañar, ya que entre todos los gastos que generan estas fiestas, ¿por qué vamos a comprar caro perfume de marca cuando la perfumería de equivalencia nos ofrece un producto de igual calidad y a un precio mucho más reducido? Y esta misma conciencia la debemos tener en el momento de adquirir cualquier otro producto, ya que no podemos dejarnos engatusar por la exuberancia de las grandes marcas, debemos ser más prácticos, consumir de forma racional sin dejarnos sucumbir por los encantos de la publicidad.