O hay química o no la hay, y es que el amor, no consiste más que en eso. Sí, no es fácil de asimilar, pero el enamoramiento no es más que una respuesta química, un engaño de la naturaleza para cumplir con la misión que nos ha traído a la tierra, la reproducción y la perpetuación de la especie. Y poco más hay. El resto, un invento, un cuento, una promesa de felicidad que nunca llega. La naturaleza, sabia como es, ha sabido montárselo muy bien para hacernos creer que amamos, cuando en realidad no es más que una pulsión de vida.
No sabemos qué es lo que nos hace enamorarnos de unas personas y no de otras, será su físico, sus palabras, su intelecto, su posición social, pero el hecho es que solamente unas pocas son capaces de llegar a nosotros, de hacernos vibrar con cada roce, con cada gesto, con cada expresión, y según dice la ciencia, el olor corporal podría estar detrás de todo esto.
Hemos salido a la calle a preguntar a la gente, y la mayoría de las personas encuestadas coincidían en lo mismo: lo que más me atrajo de él/ella, fue su olor. Si al final, por mucho que intentemos apartarnos de nuestra verdadera naturaleza, somos como el resto de los animales, y no vamos por ahí oliéndonos los culos de milagro, o por que como dijo el señor Sigmund Freud, porque nos reprimimos, y solo en base a esta represión se ha construido la civilización.
Un dato curioso es que una de las cosas que más comentan las parejas en trámites de separación, es que no soportan el olor de sus compañer@s sentimentales. Hasta ahí llegamos y deja patente la importancia del olor y su estrecha relación con el sexo y el amor (que es lo mismo).
Por eso, es un fallo enorme el tratar de camuflar nuestro aroma natural con desodorantes, geles y perfumes, que lo único que hacen es disminuir nuestro atractivo sexual, aunque pensemos todo lo contrario. Esto no quiere decir que tengamos que ir por ahí oliendo a mofeta, tampoco hay que ponerse drásticos, pero sí que deberíamos intentar no disfrazarnos tanto.
Porque hay quien se toma esto del olor natural al pie de la letra y hay que ver lo que apestan. De hecho, ayer entré en una tienda y casi me desmayo. ¿Es que acaso no conoce los ambientadores? Pues nada, que le terminé por decir que le echara un ojo a la web de esta empresa de servicios de limpieza en Barcelona, así como el que no quiere ofender ni nada. Y es que en esta empresa cuentan con unos ambientadores de primera calidad, elaborados con una selección de las mejores esencias para perfumar el ambiente con un agradable aroma y su efecto se prolonga durante horas. Se utiliza principalmente en el hogar, tiendas, oficinas, locales públicos, etc. Dando una sensación de ambiente limpio y fresco, y se utiliza puro por pulverización de forma que se produzca una óptima micronización en el aire.
Los olores más estimulantes
No es el olor a sudor rancio, pero el olor natural del hombre, libre de químicos y sustancias artificiales, es una de las cosas que más estimula sexualmente a una mujer, ese olor a macho dispara los niveles de excitación de las féminas sobremanera, hasta el punto de volverlas loquitas de amor. Pero parad chicos, no flipéis que esto no significa que a partir de ahora podáis ir por ahí oliendo a culo. Estamos hablando de ese sutil olor a ligero sudor que uno puede tener cuando llega de marcha, o tras una noche envasando whisky hasta límites insospechados. Esto último es cosecha propia, que me pone mucho cuando un tío huele a alcohol (no me juzgues que a saber lo que te gustará a ti…)
Pero el hecho es que hay olores más estimulantes que otros, y además varían en función del sexo. Por ejemplo, según los estudios a las mujeres les estimulan más los olores florales o los afrutados, mientras que a los hombres les ponen más las hierbas.
Así que fruta, flor, sudor o hierba, y no se te ocurra oler a nada más si quieres tener una vida sexual plena y satisfactoria.